El sargento d'Agostino miró a su alrededor y le hizo una seña a Rodrigues. El Jaguar retiró el seguro y lanzó la granada de humo entre los silos que se encontraban más adelante. El visor de d'Agostino cambió a visión aumentada y entró corriendo en la nube de humo que ya se estaba formando.
- Rodrigues, te quiero listo a mi señal. Recoger el paquete y salir cagando leches. Entendido?
- Roger sargento.
Al pie de la loma vio al Irmandinho, corriendo con la caja de suministros a la espalda. De repente, aquel infeliz se giró, cogió su rifle y salió disparado hacia el humo. d'Agostino sonrió frente a aquel extraño giro del destino. La suerte parecía sonreír al Intruder aquel día.
- Yippee ki yay, hijo de puta - Masculló entre dientes mientras acribillaba al ingeniero utilizando alguna que otra bala de más. - El paquete está listo para recoger, pasa por correos Rodrigues. Yo voy a buscar a ese lobo cabrón que nos ha jodido el flanco. Alguna señal?
El intercomunicador dio la señal de conexión del teniente Ingrosso.
- Lo tienes a tus dos. No esperes fuego de apoyo, estamos clavados en el callejón con un spetsnaz dándonos trabajo. Felicidades, tu lista de la compra acaba de añadir un nuevo nombre. Cuando acabes con el lobo ve a por el ruski.
- Claro teniente, dicho y hecho. Otro paseo por el campo los Comandos de Asalto de Corregidor.
d'Agostino giró en el silo, con el humo retirándose justo a tiempo para ver la inmensa figura del dog warrior agazapado. Sin añadir nada, su arma lo dijo todo por él. Aquel bastardo había acabado con varios de sus compañeros, y sólo lo saludó cuando estuvo en el suelo, sangrando.
- Come plomo, maldito perro.
El siguiente objetivo estaba bastante más lejos. Su visor táctico estimaba 83 metros hasta el spetsnaz según la telemetría del teniente Ingrosso y su equipo. La loma que presidía el área bloqueaba su visión. se acercó con cuidado abriendo el ángulo de tiro.
- Mierda.
Lo único que alcanzó a oír el teniente Ingrosso fue un golpe seco por el intercomunicador. Una luz roja parpadeó, actualizando el estatus de su Intruder a "incapacitado" lo cual podía ser cualquier cosa entre inconsciente o la cabeza reventada por una bala explosiva. En cualquier caso, tocaba improvisar.
- Teniente Ingrosso a todas las unidades. Nuestro ángel vengador ha caído. Llega la hora de los valientes y los que se cocinan su propia cena. Kitting, envía un zond a por d'Agostino, necesito evaluación. Me confirman que uno de los paquetes ya está en casa. Rodrigues, espera extracción. Pasamos a objetivo secundario, quien esté disponible, que entre en acción de cobertura, me toca cruzar este jodido patatal hasta el VIP y nuestro amigo el ruso creo que me tiene manía.
Amartillando su fusil, Ingrosso respiró hondo dos veces.
- A la de tres, fuego de saturación al spetsnaz. Si caigo por el camino abortad misión y dirigios al punto de reunión.
- Señor - La voz de kitting se saltó el protocolo - Si usted cae iremos a buscarle igual que hacemos con todos y nos iremos a casa con unas cuantas cabelleras más, de paso.
- Hay que joderse, lo que llegan a respetarle a uno. Venga mamones, haced bien vuestro trabajo y tal vez sobreviva con una pierna menos para contar la historia. Tres, dos...